Sometemos el cuerpo humano a una carga, este se fatiga y
disminuye el rendimiento, le damos una recuperación
adecuada para que este cuerpo haga unas adaptaciones
neuromusculares y pueda rendir a más
nivel que el nivel inicial.
Esta sería la explicación más corta de la SUPERCOMPENSACIÓN.
Muchos son los entrenadores, preparadores físico e incluso
atletas se piensan que por entrenar más duración o a más intensidad es mejor y
que el deportista va a mejorar más y rendir mejor…pues malas noticias, NO ES
ASÍ.
El cuerpo humano
necesita una recuperación tras la aplicación de una sobrecarga, y esta
recuperación aumentará tu nivel del próximo entrenamiento.
¿Qué puede pasar si no respetamos los tiempos de
recuperación?
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Si no recuperas el tiempo adecuado, la
supercompensación no se produce, pudiendo provocar una fatiga crónica.
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Si recuperas demasiado tiempo puede ser que esta
tampoco se produzca de manera positiva y que vuelvas al nivel inicial en el
entrenamiento.
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Igual que cada deportista necesita una carga,
necesita una recuperación. Principio de individualización.
Pero, ¿cuál es la mejor recuperación? Según varios autores y
trabajos de investigación podemos llegar a la conclusión que la recuperación en
el trabajo de las diferentes capacidades físicas es:
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Capacidad aeróbica: 10h
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Potencia aeróbica: 12h
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Fuerza: 24h
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Velocidad: 48h
Siempre vamos a tener en cuenta el deporte practicado, la
carga psicológica y las sensaciones del deportista.
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